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¿Cuándo fertilizar?

Se prefieren dos temporadas principales de fertilización:

Fertilización de primavera:

Ahora es el momento de poner los nutrientes a disposición de las raíces de tus plantas.

Si solo necesita fertilizar una vez, prefiera la primavera (abril a junio).

La primavera es el momento de saciar el apetito de las plantas en el inicio de la vegetación. Puede "calibrar" sus aportes de fertilizante al inicio de la vegetación.

Para su comodidad, el uso del fertilizante de liberación programada tipo “Osmocote Exact” aporta todos los nutrientes necesarios para el buen desarrollo de sus plantas, en proporción a sus necesidades, durante todo el ciclo de crecimiento, limitando así la contaminación por lixiviación y el derroche de recursos naturales. .

Más información:  Osmocote exacto  

¿Cómo fertilizar en primavera?


La fertilización de primavera también se llama "estiércol de mantenimiento". Se aplica al inicio y durante la vegetación. Los fertilizantes líquidos y los polvos solubles son más rápidos de asimilar porque se diluyen inmediatamente en el suelo y su efecto es inmediato pero de corta duración. Fertil'canne puede permitirte este aporte "boost" sin desperdicio, pero cuidado, evita las sobredosis. Los fertilizantes sólidos (en forma de gránulos, pellets, pellets, etc.) tendrán un efecto más duradero (según formulación), durante todo el periodo vegetativo. Incorporados al suelo con Fertil'canne®, serán efectivos inmediatamente y con el tiempo.

Fertilización de otoño:

Este es el momento de reservar nutrientes en el suelo para la primavera siguiente.

El otoño es de hecho el momento de crear reservas de "alimento" en el suelo.

Nitrógeno: aportado en forma orgánica (no soluble en agua para evitar cualquier riesgo de lixiviación), permanecerá en el suelo a la espera del calor de los primeros rayos del sol primaveral. Los microorganismos (bacterias) transformarán entonces este nitrógeno orgánico en alimento para la planta (nitratos, etc.), justo cuando ésta lo necesite.

Un aporte de Nitrógeno en forma de granulado orgánico en otoño prepara el buen desarrollo de las plantas para la primavera.

Fósforo, Potasa y Magnesio: son “fertilizantes básicos”. Durante el otoño y el invierno, el fósforo, la potasa y el magnesio permanecerán almacenados en el suelo, y estarán a disposición de las raíces de la planta para la reanudación de la vegetación en primavera.

Puede agregar estos tres elementos en el otoño si su suelo es bastante consistente (suelo "pesado"), permanecerán almacenados en el suelo sin riesgo de ser lavados. Si se dice que su suelo es "ligero", prefiera un suministro de estos elementos en primavera.

¿Por qué fertilizar en otoño?


La fertilización de otoño también se denomina "fertilizante de base" o "fertilizante de reserva". Debe ser enterrado en el suelo. En cultivos ya establecidos pero que se están debilitando, un estiércol rico en fósforo, potasio y magnesio mejorará la fertilidad del suelo y permitirá una recuperación más vigorosa. En suelos pobres, el nitrógeno orgánico estimulará la vida microbiana necesaria para la vida vegetal. Las bacterias viven gracias al nitrógeno orgánico que transforman.

Observación general sobre la fecundación.

Producir tanto o incluso más con menos insumos sintéticos es un verdadero desafío. Si actualmente nos centramos más bien en la reducción de productos fitosanitarios, la fertilización no está menos preocupada y ello por varias razones. En primer lugar, el precio de los fertilizantes debería tender a aumentar por razones de oferta y demanda y de costes energéticos.

Además, el P (fósforo) y el K (potasa) no son recursos renovables y al congelarse las reservas, la oferta disminuirá, provocando una presión adicional en los mercados. Por último, están las consideraciones medioambientales: eutrofización, emisiones de gases de efecto invernadero (siendo la fertilización nitrogenada la principal fuente de emisiones de gases de efecto invernadero en la producción de cultivos)... Por lo tanto, no se debe descuidar la optimización de la fertilización, incluso a muy pequeña escala.

Jugar con la ubicación espacial del aporte es una respuesta a estas preguntas: hablamos de fecundación localizada.

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